jueves, 7 de octubre de 2010

Jupiter-Venus, Draconidas con Luna nueva....

Estos días Venus aparece en el cielo del Oeste, a medio camino entre el horizonte y el cenit, como un lucero de leyenda. Pero al Este aparece otra estrella, al mismo tiempo, con casi el mismo brillo y altura, y el mismo color: Júpiter.

Antes de que aparezcan las demás estrellas, estos dos grandes “benefactores” de la Astrología tradicional conforman un espectáculo único, bellísimo. En el arco del cielo ya azul profundo, sus presencias se parecen más a dos dioses poderosos que a dos cuerpos lejanos e inertes.

Y si sumamos a esto que las Dracónidas ya están aumentando, tenemos ocasos memorables estos días. Un rato después aparece el amarillento Marte, muy cerca de Venus, y las demás estrellas.
Al lado de Júpiter está Urano, invisible en las ciudades, pero discernible apenas en lugares más favorables, con su destello azul.

Maravilloso para ver.
Mirar al norte y extender los brazos hasta que la mano derecha parezca tocar a Júpiter, y la mano izquierda a Venus, y quedarse así un rato, en silencio... es algo que puede ser interesante.

Por otra parte, hoy hacen pico las Dracónidas en plena Luna Nueva. Si bien para el próximo año se esperan unas Dracónidas espectaculares, este año es abundante también... 
Las Dracónidas (también conocidas como Giacobínidas) son una lluvia de meteoros cuyo cuerpo parental es el cometa periódico 21P/Giacobini-Zinner. Ocurre comúnmente los primeros días de octubre: entre las noches del 8 y el 10 de octubre es más distinguible. Las Dracónidas son mejor observables en las horas anteriores del amanecer, en regiones con cielos despejados. En 1933 y 1946, hubo tormentas de miles de meteoros de las Dracónidas (Wikipedia)

1 comentario:

Anónimo dijo...

Gracias por escribir sobre este bello y poco conocido(quien no quiere no se entera) acontecimiento.